Como bien sabrás, las baterías de motocicleta en su mayor parte utilizan ácido sulfúrico para provocar la reacción química necesaria que permita a las celdas de almacenamiento de la batería ser capaces de retener la energía precisa para realizar la función eléctrica que tenga encomendada.
El ácido sulfúrico, también conocido como electrolito, utilizado para generar estar reacción mediante la carga de los depósitos de la batería debe de contener una concentración específica, generalmente en base al tipo de batería y a su fabricante, esta concentración se suele establecer entre un 35% y un 45%.
Nueva normativa Europea que afecta al ácido de las baterías de moto.
El 1 de febrero de 2021 ha entrado en vigor en todo el territorio de la Unión Europea el nuevo << Reglamento (UE) 2019/1148 del Consejo y Parlamento Europeo, sobre comercialización y utilización de precursores de explosivos >> en el que mediante su anexo a reclasificado al ácido sulfúrico con una concentración superior al 10% como sustancia precursora que puede utilizarse para la fabricación ilícita de explosivos.
En qué medida afecta este cambio de clasificación a las baterías de moto
El hecho de que esta sustancia esté considerada de tal forma implica directamente la prohibición de su comercialización, posesión o uso por parte de personal no autorizado a ello, es decir; queda considerado como delito el simple hecho de vender, comprar o poseer ácido sulfúrico en concentraciones por encima del 10% independientemente de si esta sustancia se encuentra en botellas por separado o en los recipientes que se suelen suministrar con algunas baterías para poderlas rellenar de forma más cómoda.
En contrapartida a esta prohibición, la normativa establece que quedará permitida su venta a clientes particulares que estén en posesión de la denominada licencia EPP (Licencia de Precursores Explosivos) a los que previa comprobación de su identidad se les podrá facilitar esta sustancia, quedando no obstante registrada esta operación en un registro específico a revisión por las autoridades competentes.
Otra salvaguarda a esta prohibición es la establecida para los talleres profesionales, los cuales no tienen la necesidad de estar en posesión de la licencia EPP siempre y cuando usen esta sustancia para fines relacionados con su comercio o negocio, aunque se les puede exigir que proporcionen pruebas de ello ante la autoridad competente.
Por tanto, se pueden vender baterías a los particulares?
Si, la venta de la batería está totalmente permitida, el problema es cuando el ácido necesario para su carga y activación se suministra de manera independiente, es decir, que no se puede suministrar al particular la batería y el ácido sulfúrico por separado para que, por ejemplo, la active en su casa, esto implica que según lo dispuesto en la Ley de Venenos de 1972, se excluye una sustancia o mezcla si está contenida en un objeto específico, lo que es lo mismo, que si el ácido sulfúrico ya se encuentra en el interior de la batería se entiende que está destinándose a un uso determinado como es el de generador de la reacción química necesaria para la activación y carga de la batería, por tanto al no destinarse como precursor explosivo es totalmente lícito su uso en este aspecto.
En resumidas cuentas, si que está permitida la venta de la batería para moto siempre y cuando ya contenga el ácido en su interior, de ello se encargará en comercio autorizado en el momento antes a proceder a su entrega al cliente final, no entregando en ningún caso el ácido sulfúrico por separado, tal como hemos dicho.
Se pueden seguir comprando baterías de moto por internet?
Si, aunque como te hemos indicado la recibirás ya en tu casa con el ácido en su interior y precargadas.
En nuestra tienda ya nos estamos preparando para poder suministrar las baterías con el ácido en su interior de forma totalmente seguras y mantener esta seguridad tanto en su transporte como en la manipulación del operador logístico hasta la llegada a tu domicilio.
En resumen…
A partir del 1 de febrero de 2021 se considerará delito suministrar y/o poseer ácido sulfúrico en una concentración superior al 10% siempre y cuando no se posea la licencia EPP o se realice una actividad profesional directamente relacionada.
A partir del 1 de febrero de 2021 todas las baterías suministradas a cliente final deben de servirse con el electrolito ya cargado en sus depósitos.